DR. ARNALDO URBANO RUIZ
CRM 78064 | Eqr 25907 | RQE 36220 Cirujano General y Oncológico
Tumores raros
La carcinomatosis peritoneal es la propagación del cáncer a través de la cavidad peritoneal, que es la membrana interna que recubre el abdomen. Es decir, la enfermedad abandona su órgano de origen y se propaga. Hasta un 30% de los pacientes con cáncer, dependiendo de su localización inicial, pueden desarrollar metástasis peritoneales a lo largo de su enfermedad.
Varios tumores primarios en el cuerpo humano pueden provocar cáncer peritoneal, pero los tumores del tracto gastrointestinal, como los del intestino grueso, recto, páncreas o estómago, y de ovarios, en las mujeres, son los más comunes. La carcinomatosis también puede originarse en órganos como el apéndice y también principalmente en el peritoneo.
Existen casos poco comunes en los que la carcinomatosis se origina a partir de un tumor inusual, como es el caso del cáncer de mama subtipo lobulillar, que evoluciona a carcinomatosis peritoneal a partir de una localización mamaria primaria, es decir, completamente extraabdominal. Los tumores primarios del uraco y los tumores ginecológicos más raros, como los sarcomas ginecológicos o los tumores endocervicales del cuello uterino, también pueden causar carcinomatosis, así como mesotelioma maligno y pseudomixoma peritoneal.
El mesotelioma maligno es una enfermedad rara, diagnosticada en aproximadamente 1 a 3 pacientes por millón de personas por año. La enfermedad es tres veces más común en hombres y el riesgo de desarrollarla aumenta con la edad, generalmente después de los 60 años.
El pseudomixoma peritoneal (PMP) es otro subtipo raro de cáncer peritoneal. La mayoría de los informes sugieren que la incidencia de la enfermedad es de 1 a 2 pacientes por millón de personas por año, siendo ligeramente mayor entre las mujeres. La enfermedad se caracteriza por la producción y acumulación de moco en la cavidad abdominal.
Cirugía de alta complejidad
Hasta hace poco, no había expectativas de curación para los pacientes con carcinomatosis peritoneal, que provocaba la muerte como consecuencia de complicaciones, como la obstrucción intestinal.
Hoy la situación es diferente. Por este motivo, incluso en situaciones raras, los especialistas siempre deben sospechar de una carcinomatosis peritoneal, independientemente de la localización inicial del cáncer.
La cirugía de la carcinomatosis es extremadamente agresiva y de gran complejidad, comparándose con un trasplante de órgano. Sin embargo, con las técnicas existentes y los profesionales en constante formación, realizada en hospitales de referencia para el tratamiento de la carcinomatosis, el pronóstico puede ser muy diferente.
En el procedimiento, el objetivo es eliminar toda la enfermedad, lo que puede llevar muchas horas. El paciente pasa unos días en la UCI y luego permanece hospitalizado un tiempo más, hasta el alta hospitalaria.