El verde de indocianina (ICG) es un marcador fluorescente que se ha utilizado cada vez más en todo el mundo, con diversas aplicaciones en diferentes tipos de cirugía.

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En oncología, su uso permite identificar el ganglio centinela, que es el primer ganglio linfático en recibir células malignas de un tumor canceroso primario. Sólo después de esto se verán afectados otros ganglios linfáticos, propagándose la enfermedad por todo el cuerpo.

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Localizar el ganglio linfático centinela de forma rápida y precisa hace que el tratamiento sea menos agresivo, beneficiando a los pacientes con una morbilidad reducida.

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Hay varias formas de buscar el ganglio linfático centinela. En Brasil, se puede hacer mediante medicina nuclear y utilizando tinte azul patente. Sin embargo, el estándar de oro para detectar el ganglio linfático centinela, especialmente en casos como el cáncer de endometrio, es el verde de indocianina.

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Tecnología de vanguardia

El uso de ICG requiere una tecnología específica, que permite localizar y extirpar los ganglios linfáticos durante la cirugía. Esta cirugía se puede realizar de forma laparoscópica, robótica o mediante cirugía abierta.

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Sin embargo, muchos lugares solo ofrecen verde de indocianina en cirugía robótica, lo que limita el acceso de los pacientes, ya que no todos los lugares tienen robots y no todos los pacientes tienen acceso a esta modalidad quirúrgica.

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Esta es, sin duda, la mejor forma de darte un capricho. Es importante que todos los pacientes tengan acceso a esta tecnología lo más rápido posible para que puedan beneficiarse de los avances médicos en esta área.